Seguros de vida Mara

En ocasiones puede haber dudas en las diferencias de coberturas de estos contratos de seguro vida y seguro de decesos. Es recomendable saber que el seguro de decesos es un seguro en el que se contrata la prestación de un servicio, específicamente los relativos al entierro de los asegurados. En ella se contrata un capital determinado para hacer en frente de la prestación del servicio. Pueden incluirse en la póliza todos y cada uno de los miembros de la familia, sin mínimo de edad y con un máximo que depende de cada compañía. La prestación se efectúa justo después del fallecimiento del asegurado. En estos instantes los productos que ofrecemos para el seguro de decesos, incluyen coberturas que van desde la repatriación, asistencia en viaje y hasta cobertura bucal.

Para qué sirve el seguro de vida

En el seguro de vida Mara contratamos un capital que servirá de indemnización, en el caso de fallecimiento del asegurado, para aquella persona que exactamente el mismo determine, o bien en su defecto para su cónyuge y/o herederos legales. En un caso así el asegurado es único por cada póliza y debe tener por lo menos catorce años conforme se señala en la Ley de Contrato de seguros 50/80 de ocho de octubre de 1980. Para percibir el capital contratado en la póliza de vida es preciso abonar el impuesto de sucesiones (conforme legislación), o bien presentar la exención pertinente. Además de esto para esto va a haber que aportar cierta documentación (certificado de defunción, testamento, etcétera) y la indemnización no se va a percibir de forma inmediata si no que puede tardar hasta dos o bien tres meses. Mucha veces los bancos, así como nuestros seguros de coche, seguro de hogar etc, cualquier compañía de seguros con quien tengamos contacto nos ofrecen un seguro de vida y en ocasiones hasta nos parece de mal gusto, pues parezca que nos vaticinan la muerte, realmente si usted tiene a la familia verdaderamente cubierta con un sustancioso capital y bienes no es imprescindible un seguro, pero muchas veces calculamos mal y no contamos que nuestros herederos deberán pagar a el fisco por hacerse con nuestros bienes y si no tienen el suficiente capital de acuerdo a la herencia de bienes o es posible que tengan que pedir un préstamo o simplemente como en ocasiones tengan que renunciar a la herencia o su legado. En algunas comunidades autónomas de España se ha formado una marea ciudadana contra este impuesto de sucesiones pero ha significado de manera muy especial en Andalucía, Extremadura, Aragón, Asturias y Castilla y León. En estas cinco comunidades, una herencia de 800.000 euros se ve forzada a abonar entre 200.000 y 210.000 euros. Frente a ello, en otras regiones como Madrid o Canarias, tan solo ha de pagarse una suma inferior a los 2.000 euros. Es algo que se desconoce y que en ocasiones nos coge desprevenidos y desamparados, pues ademas de perder un ser querido nos podemos quedar en la casi que en la calle. En el momento en que nos proponemos pensar que va a ocurrir con los nuestros en el instante de nuestro fallecimiento, debemos meditar que si deseamos liberarlos de los gestiones desapacibles que acarrean las gestiones de nuestra muerte, si tenemos la posibilidad de contratar un seguro de decesos, que contemple un seguro de vida, probablemente al que menos interesa es al contratante, pero todo llega y hay que ser conscientes de ello. En caso de que nos preocupe la coyuntura económica de nuestros seres más queridos una vez nos estemos ya aquí, podemos dejarles una ayuda económica mediante un seguro de vida y dejar que sigan siendo felices.

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